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MUNDO

Malaria en Etiopía aumenta por cuenta del cambio climático

De las 429.000 personas que murieron en 2015 en el mundo por culpa de esta enfermedad, 92% murieron en África.

15 de junio de 2017

El cambio climático podría contribuir al desarrollo de la malaria en el altiplano etíope, donde hasta ahora esta enfermedad no proliferaba gracias a las bajas temperaturas, según un estudio publicado el jueves.

La gran mayoría de la población etíope vive en este altiplano del centro y norte del país, donde el clima más frío impide el desarrollo de los parásitos que causan esta enfermedad, transmitida a través de los mosquitos.

El estudio, realizado por investigadores de la Universidad de Maine y la Universidad de Columbia de Nueva York, muestra que el aumento de las temperaturas de estos últimos 35 años generó condiciones más favorables para la propagación de la malaria en estas zonas, donde viven unos seis millones de personas, según este estudio publicado en la revista Environmental Research Letters.

“Las temperaturas del aire inferiores respectivamente a 18°C y 15°C detienen de manera eficaz el desarrollo de los parásitos Plasmodium falciparum y Plasmodium vivax, responsables de la mayoría de casos de malaria en Etiopía”, explica el autor principal del estudio, Bradfield Lyon, de la Universidad de Maine, en un comunicado.

Al disminuir la temperatura con la altitud, una gran parte del altiplano etíope está por debajo de estos niveles de 18°C y 15°C.

Los investigadores han analizado sin embargo cómo, en un periodo que va desde 1981 a 2014, la altitud mínima para evitar la malaria ha evolucionado.

El nivel al que se llega a los 18°C y 15°C “ha aumentado de más de 100 metros desde  1981”, precisa Bradfield Lyon.

Como consecuencia de ello, “más personas corren el riesgo” de contraer la malaria, señala Madeleine Thomson, de la Universidad de Columbia.

África es, con diferencia, el continente donde la malaria, también llamada paludismo, hace más estragos. De las 429.000 personas que murieron en 2015 en el mundo por culpa de esta enfermedad, 92% fueron en esta región, según la Organización Mundial de la Salud.