Amonestan a todas las productoras santandereanas de aceite de palma

La Cas encontró que las siete plantas extractoras de aceite de palma que funcionan en Santander cuentan con falencias en sus planes de manejo ambiental y que algunas de ellas no tienen sus permisos vigentes. Tras una inspección realizada por la entidad, concluyeron que la totalidad de las plantas del departamento están funcionando de forma irregular.
Los casos más graves se evidencian en las extractoras Central, San Fernando, Oro Rojo y Palmeras de Puerto Wilches, donde no se está realizando el debido tratamiento a las aguas residuales. Esto ha ocasionando el vertimiento de líquidos contaminados al suelo y fuentes hídricas.

Además, se presentan casos como los de las extractoras Palma y Trabajo y Oro Rojo, que siguen operando a pesar de tener vencidos sus permisos de emisiones atmosféricas. “Hay algunas que manifiestan tener todo en regla, pero si no han aportado toda la documentación es como si no cumplieran con las exigencias”, contó la directora de la Cas, Flor María Rangel.

El incumplimiento es tal que ameritaría una suspensión de las plantas. Sin embargo, Rangel aseguró que por ahora no aplicará esta sanción. “Socialmente es muy difícil suspender las extractoras, pues hay aproximadamente 20 mil personas trabajando y la comunidad vive de la palma”, afirmó.

Con el fin de buscar acciones conjuntas para dar solución a esta problemática ambiental, la Cas citó a los representantes de las extractoras de la región por medio de Fedepalma.

“Estuvimos revisando en detalle con la Corporación los expedientes de cumplimiento de requerimientos ambientales. Pudimos aclarar dudas de las empresas y la Corporación para que se puedan poner al día en temas de emisiones atmosféricas, concesiones de agua y vertimientos”, aseguró el líder ambiental de Fedepalma, Juan Carlos Espinosa.

La directora de la CAS confirmó que en la reunión se adquirieron compromisos para darle celeridad a los procesos de mejora y se discutieron los recursos impuestos por las extractoras.