Así luce actualmente la aldea, arriba se puede ver cómo era antes de que todo el hielo se derritiera.

HISTORIA

Estos serán los primeros refugiados climáticos de Estados Unidos

Kivalina es una pequeña y remota aldea situada en una isla a 133 kilómetros por encima del círculo ártico. Gracias al cambio climático se estima que quedará bajo el agua para 2025.

9 de septiembre de 2015

En la remota aldea Kivalina (Estados Unidos) viven 403 personas y no hay más espacio para construir casas debido al cambio climático. Este fenómeno ha hecho que el hielo se derrita, las costas se erosionen y se vuelvan cada vez más pequeñas amenazando con desalojar a los pobladores.

La situación es tan grave que cuando alguien muere el cuerpo es llevado al centro de la isla para que el océano no tape la tumba. El pueblo ya fue reubicado una vez, pero debido a los efectos del cambio climático sus habitantes esperan que lo vuelvan a reubicar a un lugar nuevo que queda a 12 kilómetros del actual. (Vea: 10 datos que muestran que el cambio climático es real)

Según las Fuerzas Armadas estadounidenses esta reubicación costaría entre 95 y 125 millones de dólares mientras que para la Government Accountability Office (GAO por sus siglas en inglés) el costo es mucho mayor y ascendería a los 400 millones de dólares.

El problema es que aun reubicando la aldea esta quedaría bajo agua en una década según los Cuerpos de ingenieros de la armada de Estados Unidos. (Vea: Impresionantes imágenes del Ártico captadas por un drone

Como los días de este pueblo en su ubicación actual están contados no ha habido ningún tipo de inversión para mejorar la vida de sus habitantes que viven en condiciones deplorables: 80% no tienen baños en sus hogares y todos los habitantes recogen el agua de tanques ubicados en la mitad del pueblo, cinco galones cuestan 25 centavos de dólar. Asimismo, la única escuela esta sobrepoblada y las carreteras no se han pavimentado.

Muchos esperan que con la nueva agenda de Obama, comprometida a combatir el cambio climático sin tregua, Kivalina se salve. Por eso el viaje del mandatario a Alaska fue crucial para esta pequeña aldea. Shelby Adamas de 13 años ha vivido toda su vida en Kivalina y tiene un mensaje para el presidente: "yo amo esta isla porque es donde crecí, donde sé quién es cada persona. Necesitamos que reubiquen nuestras casas porque el océano se está comiendo nuestra isla". (Vea: La devastadora disminución del Ártico en este 2014)

Adams estaba en cuarto grado de primaria cuando una tormenta obligó a que toda la isla fuera evacuada en 2011. Esto es solo una muestra de que las condiciones climáticas han sido extremas en Kivalina por muchos años ya que el calentamiento global ha despojado a la isla de su mayor protección contra catástrofes ambientales: el hielo.


Así lucía la isla hace unos años



Normalmente cada otoño el hielo cubre toda la costa de Kivalina y permanece así hasta finales de Junio logrando incluso detener el océano durante tormentas. Sin embargo, en la última década el cambio climático ha hecho que el hielo aparezca mucho más tarde y que se derrita rápido por lo que no hay barrera alguna que proteja a la aldea. 




A esto se suma que, al no poder salir de pesca por el clima, los habitantes de la isla dependen de la única tienda que hay en el pueblo para comer y suplir necesidades como papel higiénico, pañales y medicamentos. También, como si todo esto fuera poco, debido a la erosión los gobernantes de Kivalina se han visto obligados a incumplir leyes estatales. Un ejemplo de esto es que, por ley, las pistas de aterrizaje de los aeropuertos deben estar a una milla o más de los botaderos. Por la falta de espacio la pista de Kivalina está apenas a 150 metros del botadero.

Esto muestra que, de no recibir ayuda del gobierno, los pobladores de esta isla serán en diez años los primeros refugiados del cambio climático en el país norteamericano. Para Millie Hawley, presidenta tribal de Kivalina "nosotros somos americanos y tenemos el mismo derecho que cualquier residente americano a recibir la ayuda del gobierno. Si nuestros mandatarios están pensando a ayudar con el hambre en África, que sepan que mi gente también tiene hambre y miedo. Ayúdenos aquí".