Sabana de Bogotá. (Foto: León Darío Peláez / SEMANA)

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¿Se puede hacer minería en la sabana de Bogotá?

Una de las órdenes de la sentencia del río Bogotá era delimitar las zonas donde se puede hacer minería. El trámite avanza y el reto para que la actividad no contribuya a la contaminación del afluente sigue siendo grande.

2 de mayo de 2017

La resolución 2001 de 2016 ampliaba las zonas compatibles con la minería en la sabana de Bogotá y esta decisión imponía grandes retos sobre la forma cómo se iban a aprovechar dichos lugares. Recientemente la magistrada Nelly Yolanda Villamizar realizó una visita de verificación, lo que en teoría, permitirá hacer un diagnóstico más preciso del estado de la actividad minera en la región y llegar a acuerdos que permitan establecer dónde es compatible realizar la minería y dónde no.

El asunto ha captado gran atención, debido a que la minería se hará al tiempo que se busca descontaminar el río Bogotá y proteger su ronda. Una mala explotación minera podría poner en peligro diversos ecosistemas, frenar las medidas de protección que a paso lento se intentan poner sobre el río y al final, contribuir aún más a su contaminación.

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Pensando en eso ya se había creado la Mesa Estratégica de Minería con todas las entidades y actores involucrados en el proceso. La intención es facilitar la resolución de los conflictos en el territorio, en lo que se refiere a minería y al mismo tiempo se monitoreará el cumplimiento de todos los requerimientos del Ministerio de Medioambiente.

Durante la última inspección realizada, Villamizar  levantó parcialmente la suspensión de los efectos jurídicos de 19 polígonos de compatibilidad minera: tres en Bogotá, uno en Soacha, uno en Sibaté, uno en Subachoque, uno en Tabio, uno en Facatativá, dos en Zipaquirá, uno en Cogua, dos en Guasca, tres en Guatavita, dos en Nemocón y uno en Tocancipá.    

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Todavía falta levantar las medidas en cinco polígonos, pero esto se hará cuando se conozca el reemplazo de la magistrada Nelly Villamizar, quien fue suspendida por el Consejo Superior de la Judicatura, entidad  que la inhabilitó por un año para ejercer cargos públicos.

Sin embargo,  vale la pena recordar que la delimitación de las zonas donde se puede hacer minería era una orden del Consejo de Estado de hace más de dos años, que no se ha podido finalizar por completo.

Tarde o temprano el Gobierno se enfrentará a comunidades que seguramente se opondrán a la exploración y explotación minera en sus municipios. El tema no será fácil ya que, por ejemplo, casi todos los votantes de la consulta popular en Cajamarca (Tolima) le dijeron no a la mina de La Colosa.