Ciudadanos, el punto de la transformación

Pintar cebras en forma de teclas de piano en la calle fue la acción que generó un cambio en los ciudadanos ibaguereños. El colectivo Visionarios, de la mano de la alcaldía local rescataron la herencia musical de la capital tolimense a partir del arte y le dieron a los peatones y conductores educación sobre cómo usar la calle de manera más inteligente y consciente.

El alcalde habló con Semana Sosteniible sobre los proyectos de renovación urbana y la necesidad de proteger el agua en una zona minera, como es Tolima

Semana Sosteible: ¿Cuáles fueron los aspectos destacados por el premio de sostenibilidad?

Luis Rodríguez: La ciudad presentó una iniciativa ciudadana con un proyecto que busca hacer renovación urbana local y que tiene que ver con la música.  También le apostamos a un proyecto que hemos denominado “Ibagué verde” donde sembramos 6000 árboles en la ciudad y a través de recicladores, que hoy llamamos innovadores, hacemos un proceso de reciclaje que nunca se había realizado en la ciudad. Por otro lado, estamos creando viveros comunales para que todos los espacios, incluyendo zonas abandonadas puedan darle paso a un jardín o una zona verde.

S.S: ¿Cómo ha sido el proceso de  transformación urbana de la ciudad?

L.H: Estamos trabajando con los empresarios.  Arreglando los separadores de nuestras avenidas principales.  Igualmente, hay planes padrinos en los que el sector privado adopta ciertos sectores, bajo la dirección del municipio, para recuperarlos y mejorar la situación. Es un proceso difícil, es cultural y necesitamos al sector académico. Por eso estamos tocando las puertas de la comunidad e involucrándola, ya que sin esta no podríamos hacer nada. Si esto es de liderazgo exclusivo de un gobierno no perdura.


S.S: ¿Qué acciones concretas están tomando para mitigar los efectos de la minería o proteger el área?

L.H: Estamos trabajando en una política que proteja  el recurso más importante: el agua.  Para eso nos apoyamos en el Conpes 3570  y estamos en unos procesos de renovación de zonas rurales que han sido totalmente deforestados. Además,  estamos en una lucha para darle a nuestros cañones espacios bajo zonas de reserva hídrica, o zonas de reserva natural.

Por ejemplo, el río Conbeima que nace en el nevado del Tolima, hace 30 años tenía capacidad de 9000 litros por segundo. Hoy son apenas 3000 litros por segundo y no podemos dejar que disminuya.

Este esfuerzo de la comunidad y la alcaldía local fue premiado en la ceremonia de entrega del Premio de Sostenibilidad Urbana, organizado por la Ciudad Verde, donde 37 ciudades fueron medidas bajo indicadores de sostenibilidad. Amalfi, Bogotá y Palmira fueron otras de las ciudades ganadoras.