TENDENCIAS

Paris Jackson y su activismo medioambiental en los Grammy

La hija de Michael Jackson reapareció en el Staples Center, ocho años después de haber asistido al funeral de su padre realizado en ese mismo lugar. Allí aprovechó para sentar su posición sobre el controvertido Dakota Access Pipeline.

13 de febrero de 2017

El pasado domingo se llevó a cabo en la ciudad de Los Ángeles (Estados Unidos) la edición número 59 de los premios Grammy. En la ceremonia, Paris Jackson la hija del desaparecido Michael Jackson, fue la encargada de introducir la presentación de Daft Punk junto a The Weeknd. Cuando la ceremonía seguía su curso la joven, de 18 años, se salió del protocolo y aprovechó la ocasión para sentar su voz de protesta en contra de  los oleoductos que afectan el medioambiente, especialmente el proyecto Dakota Access Pipeline, reaprobado hace unas pocas semana por el presidente estadounidense Donald Trump.

“Podríamos usar este tipo de emociones para protestar por la tubería chicos,  #NoDAPL”  haciendo referencia al Dakota Access Pipeline, cuyo trazado atravesará varias regiones del Estados Unidos, iniciando en los  campos de petróleo ubicados  en el noroeste de Dakota del Norte pasando en línea semirrecta hacia el sur-este, a través de Dakota del Sur y Iowa, terminando en los tanques de petróleo cerca de Patoka en Illinois.

El proyecto ha sido producto de fuertes críticas debido al impacto ambiental que puede generar en poblaciones indígenas como en la reserva de Standing Rock, donde sus habitantes temen por la contaminación del rio Missouri, principal fuente de vida para esta comunidad.

Este tipo de activismo de la hija del ‘rey del pop’ no es nuevo, ya que en 2016 se tatuó su tobillo para apoyar esta causa con una imagen sagrada que representa la protección ambiental de los pueblos, diseñada por Stephanie ‘gran aguila’ un nativo de la región Standing Rock.