Fiscalía desarticuló banda dedicada al tráfico ilegal de madera

Un total de 19 presuntos integrantes de una organización al margen de la Ley dedicada a la explotación y comercialización ilícita de madera en Cundinamarca y Boyacá fueron judicializados luego de un operativo realizado por la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos de la Fiscalía. 

De acuerdo con la entidad judicial, de las personas capturadas 16 aceptaron cargos por daño en los recursos naturales, ilícito aprovechamiento de aquellos que son renovables, falsedad material en documento público, cohecho por dar u ofrecer y concierto para delinquir, entre otros.

En el procedimiento judicial, que se llevó a cabo entre el 22 y el 24 de julio pasados, llama la atención, según la Fiscalía, la presencia de varios propietarios de establecimientos comerciales reconocidos en la zona y cuya actividad se relaciona con la comercialización de distintos tipos de madera.

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El material probatorio recaudado permitió constatar que los comerciantes, al parecer, falsificaban los permisos y documentos requeridos por las autoridades ambientales para el transporte de la mercancía. De esta manera, concretaban la comercialización de manera ilegal.

De acuerdo con el reporte de la Fiscalía, la Policía Judicial evidenció cómo la organización que operaba de forma ilegal extraía madera de áreas de reserva forestal que luego transportaban con salvoconductos falsos adquiridos por los conductores de los vehículos en que era movilizado el material.

De igual forma, se logró establecer cómo en este caso los documentos los adulterados eran presentados para engañar a la Policía de Carreteras en las inspecciones y retenes de seguridad que se fijaban a lo largo de las vías por las que se movilizaban los camiones con el material maderero.

Como si esto fuera poco, la investigación logra establecer con claridad los lugares en los que se ubican los  centros de acopio al punto de permitir señalar cómo muchos se localizan en zona rural de municipios en Cundinamarca y Boyacá.

Por su parte, la distribución del material ilícito se realizaba en establecimientos legalmente constituidos en diferentes ciudades del país. La investigación indica que cada ruta tenía asignado un conductor y personas que lo asistían.

Rutas de transporte de la madera

La Fiscalía logró identificar que eran seis las rutas que manejaban.  La primera se determinó en una reserva entre los municipios de Guatavita y Cota, en Cundinamarca, pasando por Sopó, Briceño y Chía

La ruta dos se identificó entre Guasca y Bogotá, pasando por los municipios de Sopó, Briceño, la represa de Tibitó y Zipaquirá. Una tercera ruta estaba establecida entre  Chocontá y Bogotá, haciendo la travesía por las poblaciones de Sesquilé, Gachancipá, Tocancipá, Briceño y Bogotá.

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La cuarta se determinó entre una reserva de Guatavita y Cota, pasando por Sesquilé, Nemocón, Zipaquirá y Chía; una más entre Zipaquirá y Bogotá, con tránsito por Chía y la última entre Ubaté y Cota, pasando por Cogua y Chía.

Dentro de las personas judicializadas se encuentran dos cabecillas de la organización, jefes de las actividades de tala y comercialización, conductores y otras personas que se dedicaban a la logística para el proceso de comercialización.