Home

Opinión

Artículo

OPINIÓN

El turismo ya es el futuro de Colombia

El crecimiento del turismo en nuestro país no puede estar desligado de la sostenibilidad.

28 de febrero de 2017

Ser el segundo país más biodiverso del mundo conlleva responsabilidades y por tal razón debemos tomar conciencia de la importancia de desarrollar un turismo amigable con la naturaleza y respetuoso con el patrimonio cultural e histórico.

Por eso la implementación de las Normas Técnicas Sectoriales de Turismo Sostenible es un requisito primordial. El Ministerio de Comercio, Industria y Turismo ha dado plazo hasta el 31 de marzo de 2017 para que los prestadores de servicios turísticos puedan renovar o inscribir su Registro Nacional de Turismo, RNT, ya que si no lo hacen no podrán obtener este requisito, indispensable para su actividad económica el próximo año.

El crecimiento del turismo no puede estar desligado de la sostenibilidad. Ha de ser un turismo que fortalezca socialmente a las comunidades donde se desarrolla, que no deprede ni arrase con los recursos naturales y culturales, y que tenga incidencia importante en los ingresos locales. Eso es posible si logramos atraer un turismo de alto gasto, de alto valor.

Colombia tiene que avanzar en la aplicación de las normas existentes para la certificación de los destinos. Actualmente existen tres lugares sostenibles certificados en el país: Puerto Nariño (Amazonas), centro histórico de Cartagena y Parque Arví en Medellín.

Actualmente estamos en proceso de certificación de otros 12: Buga, Jardín, Villa de Leyva, Ciénaga, Mompox, Salento, Filandia, Pijao, Santa Rosa de Cabal, Monguí, Jericó y el centro histórico de Bogotá: La Candelaria.

Además, tenemos dos playas certificadas: La Aguada en el Parque Nacional Natural (PNN) Utría y Playa Palmera en el PNN Gorgona. En proceso se encuentran dos playas más en el PNN Tayrona. Y para estar a tono con las normas internacionales, Colombia logró en el 2016 ser aceptada en la Foundation for Environmental Education (FEE), organismo que otorga la ecoetiqueta Bandera Azul para Playas.

En virtud de lo anterior, nos hemos trazado como meta certificar al menos una playa con Bandera Azul en 2017. En el mundo hay 4.100 playas certificadas con esta ecoetiqueta, pero en Suramérica tan solo Brasil tiene playas banderas azules.

En cuanto a los procesos de apoyo en la implementación de Normas Técnicas Sectoriales con miras a su posterior certificación, en este momento se están desarrollando tres proyectos: 1) para 700 prestadores en las Normas de Sostenibilidad, 2) para 100 Agencias de viajes en las Normas Técnicas Sectoriales de Turismo de Aventura, y 3) para 200 guías de turismo en las Normas Técnicas Sectoriales de competencias laborales.

Otras de las herramientas con las que dispone el país para mejorar la calidad turística son las guías de implementación de las Normas Técnicas Sectoriales de Turismo Sostenible. Además, este año se lanzó la plataforma de certificación virtual en calidad turística, con la que somos pioneros en América Latina.

Por otra parte, para enseñar a los prestadores turísticos las ventajas de la formalización hemos desarrollado 89 jornadas de difusión de calidad turística en el último año, a las que han asistido 4.442 personas.

Fortalecer el sector es importante ya que el turismo en Colombia está pasando por un gran momento: alcanzamos la cifra más alta de la llegada de turistas extranjeros en la historia del país (4.447.000), el sector ha generado 1,8 millones de empleos en seis años y han ingresado 5.251 millones de dólares por concepto de viajes y transporte, resultados que colocan al turismo como el segundo generador de divisas del país después de los productos minero energéticos como el carbón y otros como el café y las flores.

Pero vamos por más. Nos hemos trazado la meta de alcanzar ingresos por 6.000 millones de dólares y generar 300.000 nuevos empleos en el sector para 2018. Para lograrlo se requiere trabajar en los productos que más generan gasto, como el turismo de naturaleza, el cual mueve 215.000 millones de dólares y viene creciendo tres veces más rápido que los segmentos masivos. Tenemos que tomar un buen pedazo de esa torta.